Un retablo de terracota ubicado en el Monasterio de Alcobaça ha sido seleccionado como uno de los 25 lugares a ser salvaguardados por el programa World Monuments Watch, según anunció la organización hoy.
El retablo, una obra maestra de la escultura en terracota, es una de las joyas más preciadas del Monasterio de Alcobaça, un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1989. Se encuentra en la Capilla de San Bernardo, una de las capillas laterales de la iglesia del monasterio, y es considerado una de las mejores representaciones de la escultura en terracota del siglo XV en Portugal.
La selección del retablo como uno de los 25 lugares a ser salvaguardados por el programa World Monuments Watch es un gran honor y reconocimiento para el Monasterio de Alcobaça y su patrimonio cultural. Este programa, que se lleva a cabo cada dos años, tiene como objetivo identificar y preservar sitios culturales en peligro en todo el mundo. Desde su creación en 1995, ha ayudado a salvar más de 800 sitios en 135 países, y el retablo del Monasterio de Alcobaça es ahora uno de ellos.
El retablo, que mide 7 metros de altura y 5 metros de ancho, es una obra impresionante de arte sacro. Fue creado en el siglo XV por el maestro escultor portugués João Afonso, y representa la vida de Cristo en 38 paneles de terracota policromada. Cada panel es una verdadera obra de arte, con detalles intrincados y una habilidad técnica impresionante. El retablo se completa con una escultura de la Virgen María en el centro, rodeada por los evangelistas y los doce apóstoles.
El retablo ha sido objeto de restauraciones y reparaciones a lo largo de los siglos, pero en los últimos años ha sufrido daños significativos debido a la humedad y la erosión. La exposición a la humedad ha causado la aparición de grietas y la pérdida de color en algunas zonas, lo que ha puesto en peligro la integridad de esta importante obra de arte. Además, la erosión ha afectado a la base del retablo, lo que ha provocado su inestabilidad.
La selección del retablo para el programa World Monuments Watch permitirá que se realicen trabajos de conservación y restauración para garantizar su preservación a largo plazo. El objetivo es reparar los daños existentes y prevenir futuros, asegurando que esta obra maestra de la escultura en terracota se mantenga en óptimas condiciones para las generaciones futuras.
La noticia de la selección del retablo ha sido recibida con gran entusiasmo por parte de la comunidad local y las autoridades del Monasterio de Alcobaça. El retablo es una parte importante de la historia y la identidad de la región, y su preservación es una prioridad para todos. Además, la selección del retablo para el programa World Monuments Watch ayudará a atraer la atención internacional al Monasterio de Alcobaça y su patrimonio cultural, lo que puede tener un impacto positivo en el turismo y la economía local.
El Monasterio de Alcobaça es un lugar de gran importancia histórica y cultural en Portugal, y el retablo en la Capilla de San Bernardo es una de sus mayores joyas. Su selección para el programa World Monuments Watch es un reconocimiento a su valor y una oportunidad para asegurar su preservación y protección para las futuras generaciones. Con la ayuda de este programa, el retablo del Monasterio de Alcobaça continuará siendo una fuente de orgullo y admiración para todos los que lo visitan.